*La alerta de una vecina evitó que los cacos se llevaran el botín de la farmacia
Los vecinos de Castellnovo no ganan para sustos. La banda de murcigleros que hace una semana asaltó tres viviendas de la localidad en plena noche, mientras dormían sus propietarios, regresó la pasada madrugada a esta pequeña población del Alto Palancia, aunque esta vez con menos suerte para los ladrones. La alerta dada por una de las vecinas al sorprender de madrugada a "cuatro hombres" cargando un coche frente a la oficina de farmacia de la localidad acabó con una persecución de película, disparos incluidos, que, finalmente, no pudo saldarse con la detención de los atracadores. Eso sí, esta vez el botín -medicamentos, dos ordenadores y más de mil euros en metálico de la caja- pudo ser recuperado.
Los hechos ocurrieron sobre las 5.00 horas de la madrugada. Una vecina de Castellnovo, extrañada por los ruidos que llegaban de la calle, se asomó a la venta y vio, según el relato de los vecinos, cómo "la puerta de la farmacia estaba abierta y cuatro hombres cargaban materiales en un coche". Lo insólito de la situación llevó a la vecina a dar el aviso a la Guardia Civil, que rápidamente se personó en Castellnovo. Los agentes dieron el alto a los cacos "incluso lanzando disparos al aire", pero ni siquiera así lograron retenerlos. Los cuatro individuos, que habían forzado la oficina de farmacia y sustraído de ella dos ordenadores, medicamentos (sobre todo cremas cosméticas) y los mil euros que el boticario guardaba en la caja, lograron burlar a la Guardia Civil escapando en un coche que les estaba esperando en una esquina de la calle.
A partir de ese momento, comenzó una persecución de película por las calles de Castellnovo y la autovía A-23, que, pese al dispositivo habilitado por la Benemérita, no logró el final deseado. Los ladrones huyeron campo a través, después de dejar abandonado el coche en el que viajaban en las inmediaciones de una conocida fábrica, cerca de la localidad de Soneja. La Guardia Civil localizó el vehículo gracias a las grabaciones de las cámaras de vigilancia instaladas en Segorbe para controlar los accesos a la autovía Mudéjar. La persecución, sin embargo, sí que sirvió para recuperar el botín que los cacos pretendían llevarse de la farmacia, botín que dejaron abandonado en el coche al emprender la huida.
Dos asaltos en una semana
Esta es la segunda vez en una misma semana que los atracadores hacen aparición en Castellnovo, en ambas ocasiones aprovechando la quietud y la oscuridad de la noche. El pasado lunes, tal como publicó ya este periódico, una banda de murcigleros atracó tres viviendas de las que se llevaron un coche, un ordenador y dinero en metálico. En la misma noche, los ladrones también intentaron entrar en el estanco y un bar de la localidad, pero se vieron obligados a emprender la huida tras ser sorprendidos por un vecino que salía de casa a las cuatro de la madrugada para ir a cazar.
La Guardia Civil no llegó a intervenir en aquella ocasión y ayer, de nuevo, el tranquilo pueblo de Castellnovo se vio sorprendido por los ladrones, puede que los mismos que el pasado lunes robaron ordenadores, dinero y un turismo Ford Focus de un garaje, para lo cual tuvieron que sacar primero del mismo aparcamiento otro vehículo todoterreno que había aparcado delante, para después volver a estacionarlo en su lugar, un detalle que dejó perplejos a los propietarios.
Expectación en Castellnovo
El haber sido por dos veces objetivo de los cacos en tan sólo una semana ha levantado la alerta entre los vecinos de Castellnovo. Si ya la primera vez, los comentarios acerca del atraco llenaron en la localidad, ayer no se hablaba de otra cosa en la población del Alto Palancia. La Guardia Civil investiga los hechos y sigue buscando a los atracadores.
Los vecinos de Castellnovo no ganan para sustos. La banda de murcigleros que hace una semana asaltó tres viviendas de la localidad en plena noche, mientras dormían sus propietarios, regresó la pasada madrugada a esta pequeña población del Alto Palancia, aunque esta vez con menos suerte para los ladrones. La alerta dada por una de las vecinas al sorprender de madrugada a "cuatro hombres" cargando un coche frente a la oficina de farmacia de la localidad acabó con una persecución de película, disparos incluidos, que, finalmente, no pudo saldarse con la detención de los atracadores. Eso sí, esta vez el botín -medicamentos, dos ordenadores y más de mil euros en metálico de la caja- pudo ser recuperado.
Los hechos ocurrieron sobre las 5.00 horas de la madrugada. Una vecina de Castellnovo, extrañada por los ruidos que llegaban de la calle, se asomó a la venta y vio, según el relato de los vecinos, cómo "la puerta de la farmacia estaba abierta y cuatro hombres cargaban materiales en un coche". Lo insólito de la situación llevó a la vecina a dar el aviso a la Guardia Civil, que rápidamente se personó en Castellnovo. Los agentes dieron el alto a los cacos "incluso lanzando disparos al aire", pero ni siquiera así lograron retenerlos. Los cuatro individuos, que habían forzado la oficina de farmacia y sustraído de ella dos ordenadores, medicamentos (sobre todo cremas cosméticas) y los mil euros que el boticario guardaba en la caja, lograron burlar a la Guardia Civil escapando en un coche que les estaba esperando en una esquina de la calle.
A partir de ese momento, comenzó una persecución de película por las calles de Castellnovo y la autovía A-23, que, pese al dispositivo habilitado por la Benemérita, no logró el final deseado. Los ladrones huyeron campo a través, después de dejar abandonado el coche en el que viajaban en las inmediaciones de una conocida fábrica, cerca de la localidad de Soneja. La Guardia Civil localizó el vehículo gracias a las grabaciones de las cámaras de vigilancia instaladas en Segorbe para controlar los accesos a la autovía Mudéjar. La persecución, sin embargo, sí que sirvió para recuperar el botín que los cacos pretendían llevarse de la farmacia, botín que dejaron abandonado en el coche al emprender la huida.
Dos asaltos en una semana
Esta es la segunda vez en una misma semana que los atracadores hacen aparición en Castellnovo, en ambas ocasiones aprovechando la quietud y la oscuridad de la noche. El pasado lunes, tal como publicó ya este periódico, una banda de murcigleros atracó tres viviendas de las que se llevaron un coche, un ordenador y dinero en metálico. En la misma noche, los ladrones también intentaron entrar en el estanco y un bar de la localidad, pero se vieron obligados a emprender la huida tras ser sorprendidos por un vecino que salía de casa a las cuatro de la madrugada para ir a cazar.
La Guardia Civil no llegó a intervenir en aquella ocasión y ayer, de nuevo, el tranquilo pueblo de Castellnovo se vio sorprendido por los ladrones, puede que los mismos que el pasado lunes robaron ordenadores, dinero y un turismo Ford Focus de un garaje, para lo cual tuvieron que sacar primero del mismo aparcamiento otro vehículo todoterreno que había aparcado delante, para después volver a estacionarlo en su lugar, un detalle que dejó perplejos a los propietarios.
Expectación en Castellnovo
El haber sido por dos veces objetivo de los cacos en tan sólo una semana ha levantado la alerta entre los vecinos de Castellnovo. Si ya la primera vez, los comentarios acerca del atraco llenaron en la localidad, ayer no se hablaba de otra cosa en la población del Alto Palancia. La Guardia Civil investiga los hechos y sigue buscando a los atracadores.
Fuente: Las Provincias de Castellón
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